Un simple acto como este, aporta múltiples beneficios al medio ambiente, proporcionando también ventajas para la empresa. Con este gesto se pueden recuperar grandes volúmenes de metales, plásticos, así como vidrios para volver a introducirlos al proceso productivo.
Según el programa de sistemas fotovoltaicos de la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), anunció que en el año 2050 los paneles fotovoltaicos podrían ser la principal fuente de energía eléctrica en el mundo.
Es por eso que, llevando a cabo un buen reciclado de estos, la producción de energía solar implicará una sostenibilidad más respetuosa con el medio ambiente, que al fin y al cabo es lo que buscamos cuando decidimos adquirir este tipo de placas solares, así como la disminución de la factura eléctrica.